"ALMA DE OTOÑO"

Abro los ojos con la luz que tanto anhelaba
el fresco aroma envuelve en paz mis recuerdos
con esa sonrisa tímida del sol sobre el reflejo de las claras aguas
con el manto vivo en oro y cobre que cubre el suelo.

¡Aquí estoy! ¡En silencio! Al inicio del camino,
percibo la caricia que brota en cada suspiro
escucho el gozoso revoloteo de las aves creando un nuevo nido
veo caer las hojas más sabias para dejar paso a las que no han llegado a su destino.

¡Avanzo! Dejo fluir mis pensamientos,
despego las fuerzas que me han ayudado a soportar tu ausencia,
que han retenido mis lágrimas entre un tiempo revuelto
que me han mantenido en pie sobre mis propias piedras.

Cielo oscuro aun cuando era de día y noches turbias aun cuando se alumbraba de estrellas
corazón que en pedazos se recomponía con la enmascarada esperanza
con el dolor de que nuestro amor llegó a su última esfera,
desde los más alcanzados deseos al foso de la ilusión más amarga.

¡He regresado! Junto a las montañas que marcaban nuestro sendero
bajo los frondosos árboles que daban sombra a nuestros abrazos
a la cascada que con su caída ponía música a esos fogosos besos
a la pasión que cuerpo a cuerpo al atardecer nos brindábamos.

La andada desprende de mi la nostalgia
recobro los latidos que dejé de escuchar
noto la firmeza en mi presencia y vibro en magia
en destellos que reaniman la mirada y florece mi libertad.

Porque vuelvo a ser yo misma,
soy el cantar de mi despertar, la reina de mis sueños
la dueña de mi vida
la dama que emprende los momentos más bellos.

Hoy mi alma pasea con el alma del otoño
resurge la llama del fuego que abre mi pecho sin miedo
digo adiós a mis pesares con un simple soplo
vuelo, corro y voy donde me lleve el viento.

Yolanda Iscar.

(Concurso poema "OTOÑO" por Zenda e Iberdrola)